REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
JUZGADO PRIMERO DE PRIMERA INSTANCIA AGRARIA





TRIBUNAL SUPREMO DE JUSTICIA
JUZGADO PRIMERO DE PRIMERA INSTANCIA AGRARIA DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO TRUJILLO.
Trujillo, 02 de Junio de 2.014
204º y 155°

IDENTIFICACIÓN DE LAS PARTES Y SUS APODERADOS

DEMANDANTE-RECONVENIDO: LUÍS GERARDO DELGADO BASTIDAS, venezolano, titular de la cédula de identidad número 14.781.327, domiciliado en la Parroquia Cabimbù, Municipio Urdaneta del Estado Trujillo
REPRESENTANTE JUDICIAL DE LA PARTE DEMANDANTE: YVIS MARINA PARRA BARRIOS, venezolana, mayor de edad, inscrita en el Instituto de Previsión Social del Abogado bajo el número 25.990.
DEMANDADOS-RECONVINIENTES : MARIA LIBORIA DELGADO MORILLO, MARY DEL ROSARIO DELGADO UZCATEGUI, EDEN DEL CARMEN DELGADO UZCATEGUI, ARELIS MARIA DELGADO UZCATEGUI, MARIA ELVA DELGADO UZCATEGUI, JOSÉ LORENZO DELGADO UZCATEGUI, FLOR MARIA DELGADO UZCATEGUI y MARIA ELBA UZCATEGUI, venezolanos, titulares de las cédulas de identidad números 12.038.446, 12.038.442, 14.151.999, 14.151.998, 16.433.484, 14.309.000, 16.463.385 y 9.049.522

REPRESENTANTE JUDICIAL DE LA PARTE DEMANDADA: MIREYA DEL CARMEN SEGOVIA y MARIA DEL CARMEN VALECILLOS MORILLO, inscritas en el Instituto de Previsión Social del Abogado bajo los números 158.269 y 167.138
ACCIÓN: ACCIÓN POSESORIA POR PERTURBACIÓN

EXPEDIENTE: A 0288-2013

APELACIÓN DE SENTENCIA INTERLOCUTORIA
Vista la diligencia de fecha 27 de Mayo de 2.014, presentada por la abogada en ejercicio YVIS PARRA, inscrita en el Instituto de Previsión Social del Abogado bajo el número 25.990, mediante la cual expone:
“A todo evento apelo del auto de este Tribunal de fecha 21-05-2014, dejando constancia expresa a través de mis intervenciones en la audiencia preliminar de los hechos que quedaron admitidos, los cuales no se hacen constar en este auto…” (Resaltado del Tribunal y Subrayado de la Diligenciante)

Ahora bien, La Ley de Tierras y Desarrollo Agrario en su artículo 228 de forma expresa establece:
La sentencia definitiva es apelable a ambos efectos, dentro de un lapso de cinco días de despacho, computados a partir del día siguiente de la publicación del fallo o de la notificación de las partes si el mismo hubiere sido publicado fuera del lapso establecido en el artículo anterior.
En el procedimiento oral las sentencias interlocutorias son inapelables, salvo disposición especial en contrario.
(Resaltado del Tribunal).
En este contexto, La Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia en sentencia de fecha 07 de abril de 2014, que recayó sobre el expediente número 12-1180 señaló:
“(Omissis)
Ahora bien, debe acotarse que el derecho a la tutela judicial efectiva (como garantía constitucional) supone la facultad de acceder a la justicia, impartida conforme al artículo 26 del Texto Fundamental (imparcial, gratuita, accesible, idónea, transparente, autónoma, independiente, responsable, equitativa, expedita, sin dilaciones indebidas, sin formalismos o reposiciones inútiles); por su parte, el derecho al debido proceso que a su vez comprende el derecho a la defensa, el derecho a ser oído, el derecho al juez natural, entre otros, no incluye dentro de sus componentes la recurribilidad absoluta de todas las providencias judiciales, pues ésta sólo tienen cabida, si la ley así lo contempla.
Por ello, la circunstancia de que determinados juicios se sustancien en una sola instancia, o que determinadas resoluciones judiciales no posean apelación como es el caso de autos, responde en algunos casos, a la voluntad del legislador de descongestionar, dentro de lo posible, los tribunales de la República, y en el caso del procedimiento agrario responde a esos principios superiores que llaman a tomar una decisión ajustada a derecho de la manera más expedita, visto el fin último que se persigue, como lo es el mantenimiento de la seguridad agroalimentaria de la Nación y el aseguramiento de la biodiversidad y la protección ambiental.
En efecto, la jurisdicción especial agraria es la llamada a amparar los principios constitucionales previstos en los artículos 2, 26, 49, 305 y 307 y que el legislador concentró en el artículo 1 de la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario, como la consolidación de los mismos dentro de un Estado Democrático, Social de Derecho y de Justicia, en la búsqueda de la profundización de los valores constitucionales de desarrollo sustentable, inherentes a la seguridad agroalimentaria y a la justa disponibilidad de alimentos de calidad, distribución de la riqueza y planificación estratégica, democrática y participativa; así como la mejora de la calidad de vida de la población campesina, y el logro de un desarrollo armónico y viable en el contexto de la justicia social que toda actividad agraria persigue.
En este sentido, la exposición de motivos del Decreto con Fuerza de Ley de Tierras y Desarrollo Agrario, dispone en cuanto al procedimiento agrario, que el mismo se informa de los valores contenidos en el artículo 257 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, relativos a la simplicidad, oralidad, uniformidad y eficacia, procurando un procedimiento sencillo que desarrolle el principio de celeridad y economía procesal.
Por ello, la creación de incidencias vía jurisprudencial, en este caso la apelación, de decisiones interlocutorias, estando expresamente prohibidas por el texto adjetivo agrario, van en contra de los postulados que tan celosamente resguarda dicho instrumento normativo, llegando a quebrar el fin supremo conseguido con la implementación de un procedimiento oral, que es se reitera, la consecución expedita de la justicia, más aun cuando las partes pueden alegar los gravámenes que se le hayan causado por la sentencia interlocutoria en la impugnación de la sentencia definitiva, garantizándose así el derecho a la tutela judicial efectiva…” (Resaltado del Tribunal)

Ahora bien, de la norma antes transcrita, así como la jurisprudencia se evidencia que el legislador patrio no prohibió de forma expresa la apelación de las sentencias interlocutorias, pero si limitó el acceso al mencionado recurso, siendo obligatoria a tales fines la existencia de una disposición especial que así lo establezca, ejemplo de ello se constata en los ordinales 9º, 10º y 11 del artículo 346 del Código de Procedimiento Civil, siempre que fueran declaradas con lugar dichas Cuestiones Previas; en tal sentido este sentenciador declara inadmisible el Recurso de Apelación interpuesto contra la decisión de fecha 21 de Abril de 2.014, en la cual este Tribunal fijó los limites de la controversia. Así se decide.



Abg. JOSÉ CARLENIN ARAUJO BRICEÑO
JUEZ.-


ADRIANA VIRGINIA GIL
SECRETARIA ACCIDENTAL.-


EXP. A-0288- 2013
JCAB/AVG.