REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
JUZGADO PRIMERO DE PRIMERA INSTANCIA AGRARIA DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO TRUJILLO.
Trujillo, 04 de octubre de 2019
208º y 159°

I. IDENTIFICACIÓN DE LAS PARTES Y SUS APODERADOS.
PARTE DEMANDANTE: Ciudadano PEDRO ANTONIO VASQUEZ, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad número 11.704.153, respectivamente.
REPRESENTANTE CONFORME A LA LEY DE LA PARTE DEMANDANTE: Abogado RAFAEL EDUARDO BRICEÑO QUINTERO, inscrito en el Instituto de Previsión Social del Abogado bajo el número 164.979, Defensor Público Agrario N° 02 del Estado Trujillo.
PARTE DEMANDADA: Ciudadanos ANA MARIA BETANCOURT CACERES, PEDRO AQUILINO ALTUVE, CREMENCIA BETANCOURT DE HIDALGO, JOSE CORNELIO BETANCOURT CACERES Y ROSA BETANCOURT ALTUVE. Venezolanos, mayores de edad, titulares de las cédulas de identidad números 9.377.304, 5.634.228, 5.634.283, 4.303.320 y 12.719.040...
REPRESENTANTE CONFORME A LA LEY DE LA PARTE DEMANDADA: Abogado PEDRO EDUARDO ORTEGANO, inscrito en el Instituto de Previsión Social del Abogado bajo el número 127.598, Defensor Público Agrario N°03 del Estado Trujillo.

ASUNTO: ACCION POSESORIA POR PERTURBACION A LA POSESION E INDEMNIZACION DE DAÑOS.

EXPEDIENTE: A- 0548-2017


II. BREVE RESEÑA DE LAS ACTAS PROCESALES Y SINTESIS DE LA CONTROVERSIA

Este tribunal pasa a extender la presente sentencia; no sin antes hacer una síntesis, precisa y lacónica del asunto planteado, ello de conformidad al artículo 243 ordinal 3º del Código de Procedimiento Civil, en tal sentido, se observa:
En fecha 15 de marzo de 2017, el ciudadano PEDRO ANTONIO VASQUEZ, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad número 11.704.153, respectivamente, asistido por el Abogado RAFAEL EDUARDO BRICEÑO QUINTERO, inscrito en el Instituto de Previsión Social del Abogado bajo el número 164.979, Defensor Público Agrario del Estado Trujillo, incoa la presente acción por ACCION POSESORIA POR PERTURBACION A LA POSESION E INDEMNIZACION DE DAÑOS, en contra de los ciudadanos ANA MARIA BETANCOURT CACERES, PEDRO AQUILINO ALTUVE, CREMENCIA BETANCOURT DE HIDALGO, JOSE CORNELIO BETANCOURT CACERES Y ROSA BETANCOURT ALTUVE, venezolanos, mayores de edad, titulares de las cédulas de identidad números 9.377.304, 5.634.228, 5.634.283, 4.303.320 y 12.719.040, alegando al respecto que desde hace dieciocho (18) años, viene ocupando y cultivando un lote de terreno ubicado en el sector Loma de El Pabellón, Parroquia el Carmen, Municipio Bocono, Estado Trujillo, el cual se encuentra alinderado de la siguiente manera: POR EL NORTE: Con terrenos ocupados por Carlos montilla y pascual Betancourt; POR EL SUR: terrenos ocupados por Jesús Betancourt y julia García;
POR EL ESTE: terreno ocupado por Gregorio García; POR EL OESTE: terrenos ocupado por Carlos montilla, dicho inmueble tiene una extensión aproximada de dos hectáreas con mil novecientos un metros cuadrados (2ha con 1901 m2), en este contexto, fundamenta su pretensión alegando:
“…En el que me eh establecido con mi grupo familiar, con la autorización del ciudadano JOSE GREGORIO BETANCOURT TORO, quien era el propietario del bien que ocupo y cultivo, y en el que he venido ejerciendo la posesión pacífica y reiterada con ánimo de dueño, de igual forma trabajando las arduas labores del campo con mi familia, pero es el caso ciudadano juez, que en fecha once (11) de marzo de 2014, me vi en la imperiosa necesidad de acudir ante las instalaciones de la defensa publica extensión bocono, ya que me vi bajo una serie de perturbaciones ocurrida por parte de los ciudadanos, ANA MARIA BETANCOURT CACERES Y PEDRO ALQUILINO ALTUVE, en vista a la situación presentada, la defensora publica HELEN BERMUDEZ procedió a aperturar expediente administrativo, ante la defensoría Agraria Nro. 02, bajo el nro. TR-TR-AG—DP2-2014-578. Posteriormente se celebró acta de comparecencia, en fecha trece (13) de marzo de 2014, ante las oficinas de la defensa publica agraria del estado Trujillo, en la que asistí y también la ciudadana ANA MARIA BETANCOURT CACERES, en la que no se logró obtener algún resultado. Cabe destacar que en la actualidad he sufrido nuevas perturbaciones en mi unidad de producción por parte de los ciudadanos; CREMENCIA BETANCOURT DE HIDALGO, PEDRO AQUILINO ALTUVE, ANA MARIA BETANCOURT CACERES, JOSE CORNELIO BETANCOURT CACERES Y ROSA BETENCOURT ALTUVE, los cuales se han dedicado a ingresar a mi unidad de producción causándome daños a mi cultivo de café, ya que lo agarran sin mi autorización y sin que este en tiempo de cosecha, de igual forma, sucede con las plantaciones de naranjas, cuyas perturbaciones han sido tan persistentes, que han llegado al termino de ingresar, un caballo para que moleste a los animales que poseo en el mencionado lote de terreno, ya que alegan ser los propietarios del bien ya que son familiares del ya fallecido JOSE GREGORIO VETANCOURT TORO, quien fue el que autorizo a que ingresar a la unidad de producción objeto del conflicto. Es el caso ciudadano juez he intentado mediar con los ciudadanos antes mencionados para tratar de llegar a un acuerdo conciliatorio, y solucionar el conflicto presentado, siendo infructuosos todos los llamados que le eh realizado a través de la defensa publica agraria. ” (sic) (Resaltado del Tribunal)

Promoviendo los siguientes medios probatorios:
Testimoniales:
CARLOS LUIS BARAZARTE BRICEÑO, titular de la cédula de identidad número 15.071.219.
ELISA DEL CARMEN CACERES GRATEROL, titular de la cédula de identidad número 9.159.809.
LILIAN FRANCISCA MONTILLA PALMA, titular de la cédula de identidad número 5.633.981.
JESUS GUDIÑO LEON, titular de la cédula de identidad número 5.632.129.
MAXIMIANO GUDIÑO LEON, titular de la cédula de identidad número 9.371.598.
JOSE GREGORIO GUDIÑO MONTILLA, titular de la cédula de identidad número 25.593.920
Documentales:
- Nota de inscripción del registro único nacional obligatorio y permanente de productores y productoras agrícolas, a nombre del ciudadano PEDRO VASQUEZ.
- Garantía de permanencia socialista agrario y carta de registro agrario. emitida por el instituto nacional de tierras, a favor del ciudadano PEDRO ANTONIO VASQUEZ TORO. En fecha 04 de diciembre de 2014.

En fecha 20 de marzo de 2017, el Tribunal mediante auto admite la presente demanda librándose en dicha oportunidad las respectivas boletas de citación a los ciudadanos CREMENCIA BETANCOURT CACERES, PEDRO ALQUILINO ALTUVE, ANA MARIA BETANCOURT CACERES, CORNELIO BETANCOURT CACERES Y ROSA BETANCOURT ALTUVE; corren insertos del folio 09 al 15.
En fecha 15 de mayo de 2017, el Defensor Público agrario Nro.2 abogado RAFAEL EDUARDO BRICEÑO QUINTERO, consigna mediante escrito se subsane libelo de la demanda; corren inserto del folio 16 al 22.
En fecha 17 de mayo de 2017, el Tribunal mediante auto admite la presente demanda librándose en dicha oportunidad las respectivas boletas de citación a los ciudadanos CREMENCIA BETANCOURT CACERES, PEDRO ALQUILINO ALTUVE, ANA MARIA BETANCOURT CACERES, CORNELIO BETANCOURT CACERES Y ROSA BETANCOURT ALTUVE; corren insertos del folio 23 al 29.
En fecha 09 de agosto de 2017, el Alguacil del Tribunal mediante diligencia consigna la boleta de citación practicada al ciudadano JOSE CORNELIO BETANCOURT CACERES, posteriormente procedí a citar a los ciudadanos, PEDRO AQUILINO ALTUVE, ANA MARIA BETANCOURT CACERES, ROSA BETANCOURT ALTUVE Y CREMENCIA BETANCOURT DE HIDALGO, los cuales no se encontraron en el domicilio expuesto en la citación, en tal sentido consigno al expediente número A-0548-2017 las boletas de citación aunadas a las copias certificadas del libelo de demanda y auto de admisión; corren inserto del folio 30 al 75.
En fecha 19 de marzo de 2018, el abogado RAFAEL BRICEÑO QUINTERO, consigna mediante diligencia solicitando los carteles de citación de los demandados de autos, que no se les pudo practicar dicha citación personal, corre inserto al folio 76.
En fecha 01 de agosto de 2018, el tribunal mediante auto vista la diligencia inserta por el abogado RAFAEL EDUARDO BRICEÑO, ordena librar el respectivo cartel de citación, corre inserto al folio 77.


III. MOTIVACIONES PARA DECIDIR

De conformidad con lo establecido en el artículo 243 numeral 4º del Código de Procedimiento Civil, se procede a exponer los motivos de hecho y de derecho en que se fundamenta la presente decisión:

De la Competencia del Tribunal

La determinación de la competencia del Tribunal es elemento esencial para la validez del juicio y como bien lo señalara la Sala Político-Administrativa en sentencia del 18 de febrero de 1999, (caso E. Meléndez en amparo, exp. 14.691), “… es presupuesto imprescindible del cual deriva la potestad del juez para decidir el fondo…” (Resaltado del Tribunal).
Este Tribunal a los fines de verificar si es competente para conocer la presente acción observa que; el artículo 186 de la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario dispone:

“Las controversias que se susciten entre particulares con motivo de las actividades agrarias serán sustanciadas y decididas por los tribunales de la jurisdicción agraria, conforme al procedimiento ordinario agrario el cual se tramitará oralmente, a menos que en otras leyes se establezcan procedimientos especiales.” (Resaltado del Tribunal).

Así las cosas, se observa que la pretendida acción recae directamente sobre un predio rústico; acción ésta se interpone con ocasión de la actividad agraria, al respecto el artículo 197 ordinales 1° y 15º de la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario establecen lo siguiente:
Artículo 197 ordinales 1° y 15º:

“Los juzgados de primera instancia agraria conocerán de las demandas entre particulares que se promueven con ocasión de la actividad agraria sobre los siguientes asuntos:
1. Acciones declarativas, petitorias, reivindicatorias y posesorias en materia agraria.
Omissis…
15. En general, todas las acciones y controversias entre particulares relacionados con la actividad agraria.” (Resaltado del Tribunal).

Ahora bien, en razón de dichas disposiciones legales, es necesario señalar que la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario viene a establecer el ámbito de competencia de los Jueces Agrarios, indicando en el artículo 197 eiusdem los asuntos que éstos deben conocer; resaltando que la citada norma en su ordinal 15º otorga la competencia para conocer de forma general, las acciones y controversias entre particulares relacionados con la actividad agraria; en este sentido y como el presente asunto se enmarca dentro de las acciones previstas en el ordinal 1º de dicha disposición legal incidiendo dicha situación fáctica de una manera u otra en la actividad agraria, la cual viene a ser determinante para establecer la competencia por la materia del Juez Agrario, es por ello que éste Tribunal es competente por la materia para conocer la presente causa; Así se declara.
Con relación a la competencia por el territorio, este tribunal observa que en fecha 29 de octubre de 2008, La Sala Plena del Tribunal Supremo de Justicia mediante resolución número 2008-0051 crea los Tribunales con competencia Agraria en el Estado Trujillo, resolución ésta que en sus artículos 4 y 5 establece lo siguiente:
“Artículo 4: Crear un Juzgado de Primera Instancia Agraria con competencia en el territorio de los Municipios Candelaria, Escuque, Pampanito, Trujillo, Pampán, San Rafael de Carvajal, Urdaneta, Boconó, Carache, José Felipe Márquez Cañizales y José Vicente Campo Elías del Estado Trujillo, denominado JUZGADO PRIMERO DE PRIMERA INSTANCIA AGRARIA DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO TRUJILLO con sede en la población de Trujillo, estado Trujillo.
Artículo 5: “Crear un Juzgado de Primera Instancia Agraria con competencia en el territorio de los Municipios Miranda, Andrés Bello, Motatán, Sucre, Bolívar, Rafael Rangel, Valera, La Ceiba y Monte Carmelo del Estado Trujillo denominado JUZGADO SEGUNDO DE PRIMERA INSTANCIA AGRARIA DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO TRUJILLO, tendrá la competencia que le atribuye la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario a los juzgados de primera instancia agraria, con sede en la ciudad Sabana de Mendoza.” (Resaltado y mayúscula de la Sala Plena del Tribunal Supremo de Justicia).

En este contexto, claramente se evidencia que el asunto planteado recae sobre un inmueble ubicado en el Municipio Bocono del Estado Trujillo, en consecuencia este Tribunal con competencia agraria es competente también por el territorio para conocer y decidir el presente asunto. Así se declara.

Ahora bien, determinada la competencia del tribunal, el suscrito jurisdicente observa que en el presente asunto desde la fecha 01 de agosto de 2018, oportunidad en la cual se libró el cartel de citación, la cual el abogado de la parte demandante no ha materializado ningún tipo de actuación, lo cual pone de manifiesto la inactividad procesal de la misma, en este contexto, el legislador ha consagrado la figura de la perención de la instancia la cual constituye una sanción para la inactividad de las partes que, después de iniciado el procedimiento mediante la proposición de la demanda, se abstengan posteriormente de dar el impulso correspondiente para que el juicio finalice.
En este sentido, de acuerdo a los razonamientos antes descritos éste Tribunal considera oportuno examinar lo que establece el Artículo 267 del Código de Procedimiento Civil de la siguiente manera:

“Toda instancia se extingue por el transcurso de un (01) año sin haberse ejecutado ningún acto de procedimiento por las partes…” (Resaltado del Tribunal).

Y a la facultad que le impone el artículo 269 eiusdem, que contempla lo siguiente:

“La perención se verifica de derecho y no es renunciable por las partes. Puede declararse de oficio por el Tribunal y la sentencia que la declare, en cualquiera de los casos del artículo 267, es apelable libremente...” (Resaltado del Tribunal).

De igual manera nuestro máximo Tribunal, en sentencia de fecha 22 de septiembre de 1993, en Sala de Casación Civil, expediente número 92-0439, en juicio Banco República, C. A. contra Alejandro Saturno Santander, expuso:
“…La perención de la instancia es el efecto procesal extintivo del procedimiento, causado por la inactividad de las partes durante el plazo determinado en los ordinales del articulo 267 del Código de Procedimiento Civil. La función de la perención, no se agota en la cuestión adjetiva, sino que tiene fundamento en la misma necesidad social de evitar la litigiosidad por la litigiosidad, cuando no medie interés impulsivo en las partes contendientes, pues, para el Estado es más importante el mantenimiento de la paz, que la protección de aquellas pretensiones huérfanas de tutor en la carrera procesal. Consecuentemente a este fin, la perención está concebida por el legislador como norma de orden público, verificable de derecho y no renunciable por convenio entre las partes, pudiéndose declarar aun de oficio por el Tribunal, todo lo cual resalta su carácter imperativo. Siendo entonces la perención materia de orden público, se causa por la misma inactividad de las partes durante el procedimiento, antes de que éste entre en fase de sentencia, esto es, al día siguiente del vencimiento del termino para presentar las observaciones a los informes, pues al verificarse de derecho, su efecto extintivo se expende a todos los actos procesales anteriores y posteriores, salvo aquellos a que se refiere el articulo 270 del Código de Procedimiento Civil, es decir, que la perención no impida que se vuelva a proponer la demanda, ni extingue los efectos de las decisiones dictadas, ni las pruebas que resulten de los autos…” (Resaltado del tribunal)

Igualmente, la Sala Constitucional, en sentencia No. 02968 del 20 de diciembre de 2006, caso Up-Line Publicidad, C.A., estableció:

Omissis…
“El decreto de la perención, por el transcurso de más de un año sin actividad de las partes, ha sido considerado por esta Sala Constitucional como una sanción del legislador frente a la inactividad de las partes. Así en la sentencia Nº 956/01 del 1 de junio, se dejó sentado lo siguiente:

”...También quiere asentar la Sala, que la perención es fatal y corre sin importar quiénes son las partes en el proceso, siendo su efecto que se extingue el procedimiento, y según el artículo 271 del Código de Procedimiento Civil, en ningún caso el demandante podrá volver a proponer la demanda, antes que transcurran noventa (90) días continuos (calendarios) después de verificada (declarada) la perención…”

En base a las normas de hecho y de derecho anteriormente trascritas, este Juzgador considera que se acoplan perfectamente al presente caso, y en razón que la declaratoria de perención opera de pleno derecho, y puede ser dictada de oficio tan pronto se constate la condición objetiva caracterizada por el transcurso de más de un año sin actuación alguna de parte en el proceso, salvo que la causa se encuentre en estado de sentencia y visto que ha transcurrido más de un (1) año, sin actividad procesal, como consecuencia de ello se traduce la MATERIALIZACIÓN DE LA PERENCIÓN.

Por consiguiente y en base a lo expuesto en las líneas precedentes, este Juzgado actuando como director del proceso declara de Oficio la Perención de la Instancia de conformidad con lo establecido en los Artículos 267 y 269 del Código de Procedimiento Civil, tal como se decidirá en el dispositivo del presente fallo. Así de decide.
Igualmente este sentenciador no condena en costas dada la naturaleza de la decisión. Así de decide.
Se ordena notificar a la parte actora en su persona o a través de su Representante conforme a la Ley de la presente decisión. Así de decide.

DISPOSITIVO:

Este Tribunal Primero de Primera Instancia Agraria de la Circunscripción Judicial del Estado Trujillo en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por Autoridad de la Ley: Declara:
PRIMERO: Declara de Oficio LA PERENCIÓN DE LA INSTANCIA, de conformidad con lo establecido en los Artículos 267 y 269 del Código de Procedimiento Civil, por falta de impulso procesal de la parte demandante ciudadano PEDRO ANTONIO VASQUEZ, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad número 11.704.153, respectivamente. Así se decide.
SEGUNDO: No se condena en costas dada la naturaleza de la decisión. Así se decide.
TERCERO: Se ordena notificar a la parte actora en su persona o a través de su Representante conforme a la Ley de la presente decisión. Así se decide.

PUBLÍQUESE, REGISTRESE Y DÉJENSE LAS COPIAS DE LEY

Dada, sellada y firmada, en el Juzgado Primero de Primera Instancia Agraria de la Circunscripción Judicial del Estado Trujillo. A los cuatro (04) días del mes de octubre de dos mil diecinueve (2019). Años 209º de la Independencia y 160º de la Federación.



Abg. JOSÉ CARLENIN ARAUJO BRICEÑO
JUEZ.-
Abg. REIMER MONCAYO
SECRETARIO.-




En la misma fecha se publicó la anterior sentencia siendo las 11:30 a.m.,
Conste.